Jamás se te ocurra tocarlos y mucho menos apretar o rascar
Lo sé, es inevitable, cada vez que vemos un granito en alguna parte de nuestro cuerpo sentimos la necesidad de apretarlo y deshacernos de él.
No importa si está en nuestro cara, en nuestros brazos o en nuestras piernas: las ganas inmensas de EXPRIMIRLO son siempre las mismas. Lo peor es que creemos que al apretar el granito nuestra piel sanará más rápido, ya que eliminaremos lo que está infectado y deshincharemos el poro y aunque eso es cierto… no se aplica para todos los casos ni para todos los granitos.
1. Herpes labial
Este tipo de herpes es mucho más común de lo que creemos y se da con mayor frecuencia en los meses de invierno. Si bien a veces puede verse similar a un pequeño granito, no debemos apretarlo ya que podríamos contagiar otras zonas con herpes o simplemente hacer que se quede en nuestro rostro para siempre.
Estas ampollas son causadas por el virus del herpes simple y puede ser transmitido de una zona a otra a través del tacto.
2. Milia, o esos granitos blancos que te salen cerca de los ojos
Estos granitos, a pesar de parecer acné o algo similar, son sólo pequeñas protuberancias que no debiesen ser apretadas. Si intentas ‘reventarlas’ sólo le estarás haciendo daño a la piel.
Exprimirlos tiene poco o ningún efecto, sólo lograrás que la piel se enrojezca, irrite e inflame, mientras la milia sigue intacta
3. Puntos negros
Los puntos negros se forman casi por la misma razón que los granitos: un exceso de grasa en la piel y en los poros. Sin embargo, a diferencia de los granos comunes, no es buena idea intentar ‘reventar’ los puntos negros. Exprimir obliga a las bacterias a provocar un traumatismo aún más profundo en la piel.
4. Pelos encarnados
Los pelos encarnados aparecen usualmente cuando nos depilamos y esto se debe a que un vello crece pero queda atrapado bajo la superficie de la piel. Aunque podemos creer que lo mejor que podemos hacer es ‘liberarnos’ apretándolos, la verdad es que eso sólo nos expone a infecciones y enfermedades.
Aplica hidrocortisona, eso reducirá el enrojecimiento, picor e irritación. Lava la zona afectada con un exfoliante para ayudar al vello a salir a la superficie de tu piel.
Fuente: Soy carmin
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