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La expansión del "Cartel Jalisco", La lucha por el Poder de Baja California


Capturas minan pero no inmovilizan al Cártel Jalisco Nueva Generación, que se ha expandido hacia el Noroeste, se asentaron en Tijuana y están haciendo de Baja California una de las principales puertas de su droga  a Estados Unidos. Su expansión llega al Golfo de Veracruz, Costa Chica de Guerrero y al Bajío. 

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Las capturas de miembros importantes, entre ellos algunos “Cuinis”, han obligado al cártel a reclutar colaboradores con experiencia en otros grupos delictivos, como el Cártel Arellano y el Cártel de Sinaloa   La detención de integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y las últimas incursiones de fuerzas federales en territorios donde aparentemente se movía el líder del grupo criminal, Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, habrían motivado su desplazamiento hacia otras entidades para ocultarse y continuar con sus ilícitas actividades. 

Así lo señalaron fuentes de inteligencia consultadas tras la captura, en Zapopan, Jalisco, de José Pineda Arzate “El Avispón”, presunto operador del cártel en la zona metropolitana de Guadalajara, quien anteriormente había militado en la organización delictiva Guerreros Unidos. 

Aprehensiones como la del “Avispón”, la de Antonio Oseguera Cervantes “Tony Montana” (hermano de Nemesio), y sus cuñados los hermanos “Cuinis” Abigael, Elvis y Gerardo, así como otros jefes de plaza regionales y de comarcas, han provocado que “El Mencho” -con casi tres décadas en el submundo del narcotráfico- tenga que “importar” colaboradores y establecer alianzas con bandas criminales de Guerrero y Michoacán. Nemesio Oseguera, que según versiones de autoridades estatales estuvo a punto de ser detenido el 17 de abril en la Sierra de Amula, en Jalisco, sin dejar de operar fuertemente en aquella entidad, ha optado por la expansión de territorios como Veracruz, Guanajuato, Baja California y los ya señalados de Tierra Caliente y Costa Chica. 

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Acciones delictivas de alto impacto, entre ellas el robo de combustible, tráfico de drogas, desapariciones y crueles enfrentamientos con homicidios en los que dejan narcomensajes, son el sello del Cártel Jalisco Nueva Generación para anunciar su presencia y la “limpia” de grupos rivales para apoderarse de sus rutas y demarcaciones.   

ASENTADOS EN BAJA CALIFORNIA 

Los últimos operativos, fallidos por cierto, de corporaciones policiales federales y del Ejército Mexicano para capturar al líder del CJNG le dejaron en claro al capo que tenía que irse de Jalisco y habría optado por trasladarse a otro lugar, aún no identificado por las autoridades, las cuales presumen que corrió hacia Michoacán, su Estado de origen y donde el cártel ha mostrado un fuerte crecimiento. 

Sin que se descarte que ahora se encuentre despachando desde Baja California, donde algunos mensajes en cadáveres han indicado su estancia en la frontera. 

Nemesio Oceguera Cervantes “El Mencho”, Arturo Gomez Herrera, “El Gross” La presencia de los traficantes jaliscienses en la región, reconocida por las autoridades de Baja California, “es de muchos años”, pero “sólo en el trasiego” de grandes cantidades de droga a Estados Unidos, y pagando piso, como ha mencionado en muchas ocasiones el secretario de Seguridad del Estado, Daniel de la Rosa. 

El funcionario repite cada que le preguntan que no están instalados en el Estado. 

Sin embargo, declaraciones de criminales detenidos en Tijuana, informes de las áreas de inteligencia locales, el reporte de inteligencia de la DEA (Agencia Antidrogas de Estados Unidos) de junio de 2015,  incluso boletines e información compartida de la Comisión Nacional de Seguridad desde octubre de 2015, refutan su versión. 

Conforme a datos aportados por los gobiernos locales, el CJNG  encabezado por “El Mencho” está instalado en Baja California, de hecho, ya controlan un porcentaje de la venta de droga en parte de la Zona Este de Tijuana, con énfasis en el área de influencia y colindancia con la colonia Sánchez Taboada. 

Situación que a las fuerzas del orden no les resulta extraña, dado que desde hace años, saben que Oseguera tiene una propiedad en la zona del fraccionamiento  Mariano Matamoros, en la cual residió por algún tiempo, aunque aseguran no en los meses recientes. 

Los de Jalisco tienen una operatividad compartimentada, la cual fue detectada a finales de 2014, más plena en 2015 y lo que va de 2016. Los uniformados han detenido a operadores de cuatro tipos de grupos: los dedicados a la venta local de enervantes que matan por ampliar sus terrenos de influencia; los que llevan grandes cargamentos a Estados Unidos; quienes compran armas en la Unión Americana y las envían a Jalisco; y quienes lavan el dinero de la venta de droga y lo regresan a Jalisco a través de empresa establecidas. 

A la fecha las cabezas identificadas por el Consejo Estatal de Seguridad, con actividad en Tijuana, son: * José Juan Pérez Vargas “El Piolín”, “El JP” o “El R7”. Con relaciones cercanas a operadores del CJNG radicados en Guadalajara, cuenta con protección de agentes municipales corruptos. Tiene antecedentes delictivos por asaltos y robos de auto. 

Y aseguran, mayor relevancia en el organigrama criminal local del CJNG. * Arturo Govanni Gómez Herrera “El Gross”. Ex operador de los sinaloenses, controla el terreno tijuanense para el CJNG, y es encargado de las ejecuciones, razón por la cual fue el primero en convertirse en sujeto de interés para las autoridades. * Jesús Rafael Yocupicio “El Cabezón” o “R1”. 

Encargado de: a) El trasiego de grandes cantidades de droga, la cual de acuerdo al seguimiento, llega a Mexicali y la trasladan por tierra a Tijuana para cruzarla a Estados Unidos. b) Reclutar delincuentes de otros cárteles radicados en Mexicali para servir al CJNG. c) Cumplir las funciones de “El Piolín” y “El Gross” cuando éstos salen del Estado. 

Ubican también a operadores menores, identificados sólo por apodos como “El Gallero”, “El Mencho” y “El Trampolín” Todos mantienen pugna con dos fracciones del Cártel de Sinaloa, la encabezada por Los Aquiles, los hermanos Alfonso y René Arzate García, y Los Uriarte, hermanos y primos de Raydel López Uriarte “El Muletas”,   capturado en febrero de 2010. 

Adicionalmente, las corporaciones de seguridad investigan a los delincuentes al servicio de Alfonso Lira Sotelo “El Atlante” -detenido en septiembre de 2014-, que funcionaban como traficantes de Ismael  “El Mayo” Zambada, controlan el Este de Tijuana y Tecate, por la posibilidad de que se hayan integrado con Jalisco.   

EL REPORTE DE LA DEA 

En su más reciente mapeo de infiltración de la actividad criminal de los cárteles mexicanos en territorio de Estados Unidos (http://www.dea.gov/docs/dir06515.pdf), la Agencia Antidrogas hace notar la influencia del Cártel Jalisco Nueva Generación con un evidente énfasis en ciudades del Estado de California, particularmente las que colindan con Baja California Como zonas de influencia de los jaliscienses, evidenciando su ingreso por el Noreste mexicano,  reportan un corredor de ciudades a lo largo del suroeste de la Unión Americana que incluyen ciudades como San Ysidro, San Diego, Riverside, Orange, Bakersfield, Sacramento, con menos influencia en Los Ángeles. Y conectan con Reno, Nevada. 

Fuera de esta zona, sólo consideran presencia en tres ciudades más, Atlanta, Georgia; Dallas, Texas; y Harrisburg, en la Costa Este. Esta información está contenida en un reporte de inteligencia fechado en junio de 2015, con datos hasta mayo del mismo año. 

“Es el nuevo jugador en la ciudad, que intenta ganar el control de la plaza tijuanense”, declaró Gary Hill, agente especial a cargo de la oficina de San Diego de la DEA  respecto al CJNG, a la reportera Sandra Dibble, quien lo publicó en un reportaje el 22 de febrero de 2016 en el diario San Diego Union Tribune.   

TAMBIÉN LA CNS  

Por su parte, el reconocimiento oficial de la presencia de los traficantes de “El Mencho” a través de una tarjeta informativa de la Comisión Nacional de Seguridad  de México, fue reportada por medios locales y nacionales, dando a conocer que el túnel localizado el 21 de octubre de 2015 en Tijuana, pertenecía al CJNG. 

Asegurado por la Policía Federal, la CNS indicó que se trataba de un pasadizo subterráneo con entrada en la calle Fray Junípero Serra de la colonia Garita de Otay, de 800 metros de largo, 200 en Estados Unidos, y 10 metros de profundidad. 

Según la información, incautaron 10 toneladas de marihuana y detuvieron a 16 personas, las cuales confesaron dedicarse al embalaje y trasiego de la droga, además de estar vinculados a un grupo delictivo con operatividad en Jalisco.   

LOS DETENIDOS EN TIJUANA 

Los reportes han sido múltiples y variados en los últimos 15 meses, pero destaca uno de los primeros, plasmados en declaraciones. 

Se dio el 26 de abril de 2015, cuando Lucre Cerda Pacheco y su gente intentaron asesinar en el fraccionamiento El Rubí, a Daniel Eduardo Tapia López “El Tanque”; con un balazo en la cara lo dejaron por muerto, pero sobrevivió e informó a las autoridades que “El Cuate” Lucre lo había mandado asesinar porque descubrió e informó a la gente del Cártel de Sinaloa que éste estaba haciendo tratos con gente del CJNG, y robando droga de los sinaloenses para quedar bien con los de Jalisco. 

La noche del 3 de junio de 2015,  la Policía Estatal Preventiva capturó, en una fiesta en Rosarito, a Lucre y Marco Antonio Cerda Pacheco “Los Cuates”, tras la detención, Lucre aseguró que quien había dado entrada a la gente de Jalisco era Alberto Ávila Alvarado “El Chacal”, cuñado del operador del Cártel Arellano Félix, asesinado en abril de 2015, Luis Toscano “El Mono”; incluso manifestó que Ávila traicionó a Toscano y provocó su homicidio. 

El 28 de noviembre de 2015, la Policía Municipal capturó a un ex mando policiaco de Guadalajara, miembro del Cártel de Jalisco, y a un delincuente con varias detenciones en Estados Unidos, como presuntos responsables del ataque armado a dos oficiales de la Dirección General de Policía y Tránsito de Tijuana. 

Ese día, César Josué Castro Aguayo “El Percherón” (ex subcomandante de la Policía Municipal de Guadalajara) y  Jorge Javier Castro Valle asesinaron, en calles del fraccionamiento Mariano Matamoros, al policía Víctor Manuel Inzunza Luna, e hirieron de muerte a la agente Janeth Cocolan Almeda. Interrogados, dijeron que estaban relacionados con el CJNG, que tenían un año viviendo en Tijuana y su labor era comprar armas en California, Estados Unidos, y mandarlas a Jalisco. 

Luego, entre el 4 y 7 de septiembre de 2015, los delincuentes decidieron hacer público el mensaje de su presencia, colocando una serie de mantas en vialidades concurridas de Tijuana en puentes peatonales. Además, dijeron estar asociándose con el CAF y lo llamaron Cártel Nueva Tijuana, en el texto plasmaron nombres y apodos de los principales operadores criminales del Cártel de Sinaloa a los que pretenden reemplazar, y pretendieron presentarse como criminales menos violentos: 

“AKI ES CABRON CON CABRON NO INOCENTES”, USTEDES TAMBIEN TIENEN FAMILIA, “RESPETEN PUT…” NO SEAN MUGROSOS SI SIGUE CORRIENDO “SANGRE DE INOCENTES” LES REGRESAMOS LA CORTESIA AKI EN “LA TIA JUANA” EL CIELO ES COLOR PERLA “FUERA DE LA PLAZA” RATAS TRAICIONERAS Y SECUESTRADORES. NOSOTROS AYUDAMOS A LA GENTE Y NO ROBAMOS, NI SECUESTRAMOS MUCHO MENOS COBRAMOS PISO, NO VIVAN DE LO QUE LA GENTE GANA CON ESFUERSO RATAS MUERTO DE HAMBRE. TIJUANA TIENE NUEVO DUEÑO. Sr. MENCHO. CTNG Y CJNG PRESENTES! 

El 6 de  marzo de 2016, la PEP anunció la detención en Tijuana de Óscar Armando Fonseca Beltrán, en posesión de 17 kilos de cocaína, lo identificaron como sobrino del narcotraficante Ernesto Fonseca Carrillo  “Don Neto”, uno de los fundadores del Cártel de Jalisco; llevaba más 17 kilos de cocaína. A Esteban Ramírez González “El Gordo”, lo agarraron el 20 de marzo de 2016. Lo presentaron con cuatro fusiles, dos armas costas y balas, dijo ser operador del CJNG y delinquir en alianza con el CAF.    

“EL MENCHO” SE LES ADELANTÓ 

Aquel domingo 17 de abril, un “piquete” de soldados de las fuerzas especiales dieron con el presunto santuario donde Oseguera Cervantes se sentía seguro y dirigía al cártel: una quinta edificada en lo recóndito de la sierra, en el municipio de El Grullo, centro de operaciones desde hace por lo menos seis años del cártel. La información no llegó por los conductos habituales. 

Ni la Secretaría de la Defensa Nacional, ni la Comisión Nacional de Seguridad, dieron cuenta a los medios de comunicación del operativo. 

Fue el fiscal general de Jalisco, Jesús Eduardo Almaguer, quien dio algunos datos de la incursión de la milicia en los terrenos de Nemesio. Presuntamente había indicios de que el capo estuvo horas antes en el inmueble llamado Quinta El Rosario. 

En el sitio no había persona alguna. En cambio, se localizaron algunas armas de fuego de grueso calibre y balas que fueron aseguradas por el personal castrense. En la finca había un rifle antiaéreo calibre 50 con cargador y cartuchos útiles, una pistola calibre 38 con su cargador, 63 cartuchos calibre 7.62 para fusil AK-47 y seis cargadores calibre .223. También se localizaron tres automotores de lujo y documentación diversa, según dicho del fiscal. 

Apenas 10 días antes, agentes federales y elementos de la Marina Armada de México, habían detenido en el fraccionamiento Providencia, en Guadalajara, a Julio Alberto Castillo Rodríguez, pareja sentimental de la hija del “Mencho”, Jessica Johanna Oseguera González y presunto operador financiero del CJNG. Con Julio fueron detenidos Édgar Ernesto Moreno Barragán y José Antonio Rodríguez Contreras, quienes tenían en su poder cuatro armas largas, una de ellas con aditamento lanzagranadas y un cohete.   

HUELLAS DE LA EXPANSIÓN 

La propagación del CJNG a otras entidades no ha dejado sin su presencia a Jalisco, donde en 2016 se han registrado actos violentos en nueve de sus doce regiones, principalmente en Altos Norte, en el municipio de Lagos de Moreno, donde autoridades policiales abatieron a cuatro presuntos sicarios de la célula de un sujeto apodado “El Tun Tun”, el 18 de febrero. Un mes después, en la misma población se descubrió una empresa fantasma de seguridad que contrataba personal de vigilancia bajo engaños, para que en realidad trabajaran como vendedores de droga. 

El reforzamiento policial en esa región dio como resultado la detención de Miguel Pérez Contreras, implicado en la emboscada a soldados en mayo de 2014 en Guachinango, y la masacre de 15 policías de la Fuerza Única en abril de 2015 en San Sebastián del Oeste. Los narcos se desplazaron de Lagos de Moreno a Tepatitlán de Morelos y San Miguel el Alto, donde aún operan. 

En una balacera ocurrida el 20 de marzo de este año, en el poblado de Las Palmas, en Puerto Vallarta, militares y federales incursionaron en un campamento del CJNG deteniendo a tres de sus sicarios. Les incautaron dos armas cortas, tres lanza cohetes, tres fusiles calibre 50, 62 granadas de diferentes calibres, 88 cargadores y más de 2 mil 200 cartuchos útiles. Juan Jose Perez Vargas, “El Piolin”, “R7”, “Jp” El especialista en seguridad, Raúl Benítez, académico de la División de Ciencias Políticas en la Universidad Nacional Autónoma de México, aseguró que “el cártel está lejos de ser derrotado, y por el contrario, claramente se está expandiendo”, ocupando los vacíos de otras clicas del narcotráfico. 

Los hechos le dan la razón. El 21 de enero, en Abasolo, la Agencia de Investigación Criminal en Guanajuato detuvo a dos presuntos miembros del Cártel Jalisco y aseguró 13 armas largas, además de cinco armas cortas de distintos calibres. Los sujetos estaban en poder de mil 820 cartuchos, 30 cargadores, tres granadas y diez teléfonos celulares. 

En la misma entidad, pero en Valle de Santiago, a finales de marzo la Policía guanajuatense descubrió un túnel que se utilizaba para robar combustible de un ducto de PEMEX. El pasadizo, de 15 metros de largo por uno de ancho, iniciaba en una casa y concluía en parte de la infraestructura de la paraestatal. Según las pesquisas, los “chupaductos” eran del CJNG. 

No hubo detenidos. En Michoacán, en febrero pasado, también se hizo patente la presencia de las huestes de Nemesio Oseguera. 

La supuesta aparición de grupos criminales como La Nueva Familia, a través de sus narcomantas, advirtió que habría una limpia de “personas que apoyan al Cártel Jalisco Nueva Generación”. 

Por su parte, en las mismas fechas, el cártel de Los Viagras -que anunció la creación de un nuevo clan delictivo denominado “Los Justicieros”- también habría colocado mensajes en lonas que en Zamora, Michoacán, alusivos a la disputa de terrenos con lo que queda de Los Caballeros Templarios, La Familia Michoacana y el CJNG. 

A finales de abril, Nicolás Sierra Santana, uno de los líderes de Los Viagras, proporcionó una entrevista a un medio nacional a través de la cual acusó al procurador de Justicia de Michoacán, José Martín Godoy, de llevarlo a negociar con Oseguera Cervantes,  líder del cártel jalisciense. Declaraciones a las que el gobernador, Silvano Aureoles Conejo, restó importancia, por provenir de un presunto delincuente.   

LA OTRA CUNA DEL CJNG 

Mención aparte merece el Estado de Veracruz, donde en 2010 se dio a conocer la organización criminal, inicialmente conocida como Los Mata Zetas. 

Los años han transcurrido y el Cártel Jalisco se ha afianzado en esa entidad, donde en enero del presente año destacó su participación en el levantamiento y desaparición de cinco jóvenes en el municipio de Tierra Blanca, en contubernio con policías. 

En territorio veracruzano fue detenido uno de los principales operadores del CJNG, identificado como Francisco Navarrete Serna, presunto distribuidor de droga, operador de secuestros y ejecuciones. 

El hombre, al que se vinculó con el político priista Tarek Abdalá, había ordenado asesinar a las víctimas de Tierra Blanca. A la fecha hay 13 personas detenidas por la desaparición de los jóvenes, ocho de ellos elementos de la Policía de Veracruz y cuatro integrantes del CJNG.




Fuente: El blog del narco
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