¿Te imaginas tu vida sin el celular?
Seguro rara vez está lejos de ti, quizá lo llevas hasta al baño cuando vas a hacer tus cosas y es que simplemente, es parte de nuestro día a día. ¿Te ha pasado que sientes que vibra pero no fue así?
¿Juras que se mueve dentro de tu bolsillo pero cuando lo revisas no hay más que tu fondo de pantalla y la hora que es? Podrías ser víctima del síndrome de la vibración fantasma.
Esto le ocurre a una gran parte de personas en el mundo, es señal de qué tan dependientes nos hemos hecho del aparato a pesar de que no lo tengamos cerca.
Por tal motivo, varios científicos se dieron a la tarea de investigar el fenómeno, esto fue lo que descubrieron.
¿Qué produce el síndrome?
No te asustes, no quiere decir que estás loco o algo así, tampoco es una alucinación sino un efecto de la ansiedad por querer que algo pase con el teléfono, es una simple condición psicológica.
Lo que ocurre es que cualquier estímulo en nuestro cuerpo es interpretado como si el celular vibrara o sonara, es nuestro deseo de que así pase, que alguien te comente algo, que te llegue un mensaje a WhatsApp, que te manden un mensaje privado a Facebook…ya sabes, lo de todos los días.
Resulta que en nuestra piel los receptores que detectan las vibraciones fantasma se dedican a frecuencias bajas y altas, un celular realiza las suyas a frecuencias de 30 a 180 Hz por lo que se captan fácilmente.
Mientras más actividades realicemos en nuestro celular, más fácil será experimentar las vibraciones fantasma pues los receptores de la piel estarán atentos al menor detalle.
¿Quiénes son los más afectados por el síndrome?
Sin duda los jóvenes. En el 2012 se realizó un estudio con dos mil estudiantes de universidad, de ellos el 90% admitió que sentía que el celular vibraba cuando lo hacía, pero lo peor es que indicaron que no les molestaba porque “era parte de sus vidas”.
A medida que la persona incrementaba su nivel de ansiedad, el síndrome empeoraba pues el uso que le dan al teléfono es excesivo. Toman notas, hacen operaciones matemáticas, juegan, se comunican, se toman fotos, video…todo con el mismo aparato.
Los científicos revelaron que una persona promedio utiliza su celular por lo menos 150 veces al día. Para reducir los efectos del síndrome se recomendó tomar descansos del aparato, realizar actividades que no tuvieran nada que ver con la tecnología por lo menos 30 minutos al día ¿te atreverías a intentarlo? ¡Dile adiós al síndrome de la vibración fantasma!
Fuente: Badabun
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