El pene es un órgano sexual que: a pesar de su elasticidad tiende a tener serias lesiones, ten cuidado porque pueden llegar a ser muy dolorosas.
Con su localización externa y movilidad, el pene tiende a ser víctima de serias lesiones. Las lesiones pueden presentarse durante las relaciones sexuales, también por diferentes prácticas e incluso por accidentes.
Hay diferentes lesiones que se pueden presentar en el pene, entre ellas se encuentran: la rotura de frenillo, que es la unión de piel entre el glande y el tronco del pene.
También puede haber lesión por agentes externos, pudiendo existir una lesión accidental durante el coito o una acción deliberada como una agresión o una mutilación perpetrada por la propia persona en casos psiquiátricos.
Diferentes tipos de lesión
Rotura o desgarre de frenillo
La rotura del frenillo se produce más comúnmente durante la relación sexual, el frenillo se desgarra parcial o totalmente produciendo un dolor intenso, incluso puede haber hemorragia pronunciada. Existe tratamiento, que consiste en suturar quirúrgicamente con una anestesia local comprimiendo la zona hasta que se logre la unión.
Fractura de pene
Más que un mito es una realidad, aunque el pene carezca de cuerpo óseo, puede llegar a tener un desgarre clasificado como “fractura de pene”, esto ocurre cuando se aplica una fuerza excesiva cuando el pene está en plena erección, ( generalmente esto ocurre durante el coito y cuando la pareja se coloca encima de la persona), la fractura equivale a un desgarro en la túnica albugínea, que es una capa fibrosa que envuelve los cuerpos cavernosos del pene. En la mayoría de los casos ocurre en un solo cuerpo cavernoso, los demás afecta todo el pene, y en casos más aislados la lesión puede extenderse hasta la uretra.
Si eres hombre entenderás el dolor del que estamos hablado, si eres mujer es mejor que no lo imagines, y tengas precaución a la hora de montar el toro, cuidense chicos, que es lo más preciado que tenemos.
Fuente: En pareja
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