Conoce las consecuencias e inconvenientes de gritarle a los niﾃｱos
Una pequeﾃｱa frase pronunciada sin pensar puede afectar la salud mental de un pequeﾃｱo, por eso a la hora de comunicarte con tu hijo es necesario elegir cuidadosamente las palabras.
Una palabra a veces duele mﾃ｡s que un golpe
Los niﾃｱos que crecen en un contexto asﾃｭ por lo general intentan demostrarle a su familia que son buenos.
Sabemos que en muchas ocasiones es muy difﾃｭcil resistirse a gritar y que incluso se convierte en la forma natural de dirigirnos a miembros de nuestro trabajo, amistades y por supuesto a nuestros familiares, sobre todo a nuestros hijos.
La comunicaciﾃｳn con nuestro entorno es fundamental a la hora de relacionarnos con ellos, por eso es importantﾃｭsimo cuidar nuestro vocabulario para no lanzar gritos al aire.
Por eso, te mostramos algunas frases de las que deberﾃｭas olvidarte por completo, por ejemplo:
«Cuando yo tenﾃｭa tu edad me iba muy bien en la escuela»
Desde el nacimiento y hasta los 6 aﾃｱos ustedes, los padres, son prﾃ｡cticamente dioses para el niﾃｱo, son quienes lo enseﾃｱan a relacionarse con ﾃｩl mismo y con el mundo que lo rodea. Esta frase puede interpretarse como una competencia del padre o madre con su hijo, es algo asﾃｭ como si le dijera: “Nunca podrﾃ｡s ser como yo, no importa cuﾃ｡nto lo intentes, soy mejor que tﾃｺ”. Al crecer, estos niﾃｱos no son capaces de alegrarse con sus logros, la alegrﾃｭa aparece sﾃｳlo si su progenitor reconoce su ﾃｩxito pero eso es muy poco probable. ¡Evitalo totalmente!
Evita decirles palabras ofensivas
«Mi osito, mi gallinita, mi ratoncito..etc»
¿De cuﾃ｡ntas maneras llamas a tu hijo? Aunque la intenciﾃｳn no es mala todos esos apodos despersonifican al niﾃｱo, es como si ﾃｩl no existiera y en su lugar hubiera un animalito o un juguete con el que se puede hacer lo que sea. Durante los primeros aﾃｱos de la vida tu hij@ el aceptarﾃ｡ lo que le digas sin ejercer ningﾃｺn tipo de anﾃ｡lisis o crﾃｭtica, sencillamente ﾃｩl confiarﾃ｡ en tﾃｭ. Recuerda que el nombre de una persona es su presentaciﾃｳn ante el mundo. En algunas familias ocurre que el nombre del niﾃｱo va modificﾃ｡ndose con el tiempo y aparecen una buena cantidad de apodos «simpﾃ｡ticos»; y eso estﾃ｡ mal. El nombre siempre debe estar en primer plano, es el nombre lo que le permite sentir que es un ser completo con identidad propia. ¡No lo olvides!
«Mira, Juanito tuvo 10 en el exﾃ｡men y tﾃｺ un 8»
La mayorﾃｭa de los padres hacen todo con la mejor intenciﾃｳn, quizas ustedes mismos tuvieron una experiencia similar en su infancia y por eso tratan asﾃｭ a sus pequeﾃｱos pero… «no hay nada malo, a mi tambiﾃｩn me dijeron eso y mira, soy una persona de bien». Piensa que al decirle eso estﾃ｡s influyendo en disminuir su autoestima. Soportar algo asﾃｭ causa en realidad mucho dolor, y ese dolor suele acompaﾃｱar a los niﾃｱos aﾃｺn en su vida adulta (ademﾃ｡s de generar un odio inmediato hacia «Juanito»). Los niﾃｱos, aunque no lo creas, siempre se sienten mal cuando lo comparan con otro compaﾃｱerito de clase, o bien con su hermano o hermana. Al crecer seguirﾃ｡ comparﾃ｡ndose con competencia y eso no esta nada bien.
«Como te portaste mal ya no te quiero»
O puede ser «Sﾃｳlo te quiero cuando haces lo que te digo». Despuﾃｩs de una frase asﾃｭ el niﾃｱo empieza a esforzarse con todas sus fuerzas de actuar «correctamente», deja a un lado todas sus necesidades y deseos, «desarrolla una antena» que adivina lo que ustedes quieren y hacen “cosas” para llamar siempre su atenciﾃｳn para no ser desaprovados por ti. Al fin de cuentas el niﾃｱo como tal acaba por no existir. En la vida adulta intentarﾃ｡ satisfacer a la gente, e inconscientemente vivir bajo el principio de: «Quiero que me amen y para eso debo gustar y satisfacer, no lucharﾃｩ mis propios deseos, sino que harﾃｩ todo por cumplir los de otras personas».
«No me avergﾃｼenzes frente a la gente»
En otras palabras se le estﾃ｡ diciendo al niﾃｱo «Me avergﾃｼenzas». Los niﾃｱos que escuchan ese tipo de frases con frecuencia querrﾃ｡n que la gente vea quiﾃｩnes son ellos en realidad, pero curiosamente cuando reciben la atenciﾃｳn de alguien no saben quﾃｩ hacer con ella: se esconden, se cierran, se pierden, se crea un vﾃｭnculo de temerosidad la cual llevan consigo toda su infancia, con sus maestros, con sus amigos, con su familia, etc. “Me averguenzas” son dos palabras clave si quieres traumatizar a tu hijo.
Platica con ellos
«Eres igual a tu padre (madre)»
Esta frase ilustra sin duda la relaciﾃｳn entre papﾃ｡ y mamﾃ｡, lo infelices que se sienten el uno con el otro y el decirlo transmite esa incomodidad a su hijo. Si usted le dice a su hijo «Eres tan terco como tu padre» significa que papﾃ｡ es una mala persona con quien es imposible llegar a un acuerdo, ahora ¿serﾃ｡ que el niﾃｱo querrﾃ｡ ser como su padre el terco y malo? Cuando las malas relaciones de pareja se proyectan en el niﾃｱo, ﾃｩl deberﾃ｡ vivir con eso. ¡Ya no lo hagas!
«Si no te comes la sopa serﾃ｡s un debilucho»
Yo tenﾃｭa una conocida, una chica a quien en su infancia le dijeron «si no te lo tomas, el pajarito que vive en nuestro pecho saldrﾃ｡ a tomar a beber algo y se lo comerﾃ｡ un gato». Aunque parezca muy gracioso, ella bebﾃｭa todo lo que le daban en la noche, es decir, sus padres lograron exactamente lo contrario a lo que querﾃｭan, atemorizarla y hacerla sentir culpable si algo le ocurrﾃｭa al pﾃ｡jaro. Frases como esas son manipulaciﾃｳn y generalmente son usadas por abuelos y abuelas que tuvieron que soportar el hambre en su infancia, y van pasando silenciosamente su trauma de generaciﾃｳn en generaciﾃｳn. No manipules a tu hijo y evita que desarrolle miedos infundados y/o desordenes alimenticios.
«Si te portas mal le llamo al coco para que te lleve»
Es una frase muy cierta, a mi me asustaron con ella y fue terrible. Decir algo asﾃｭ le da a entender a tu hijo que no debe ser ﾃｩl mismo, sino alguien que se ajuste a deseos de otras personas, dﾃｩja de decirle esas cosas.. ¡Imagﾃｭnate el miedo que sentirﾃ｡ tu hijo el pensar que su propia madre o padre quien es el que lo protege sea capaz de entregarlo a una criatura desconocida y horrible! En su edad adulta estos niﾃｱos encontrarﾃ｡n difﾃｭcil confiar en alguien, no sabrﾃ｡n lo que quieren e intentarﾃ｡n gustarle a todos y cada una de las personas que los rodean.
«Ni llores, vete a tu cuarto y no quiero escucharte llorar»
Traducciﾃｳn: «¡Me arruinaste la vida, desaparece! ¡No deberﾃｭas existir!». Como consecuencia el niﾃｱo vivirﾃ｡ con un profundo sentimiento de culpa ante sus padres por haber truncado su vida. Sentirﾃ｡ constanemente que serﾃ｡ rechazado por los demﾃ｡s.
PAPﾃヾ→ Hay que ser muy cuidadosos con este tipo de frases porque los hijos pueden cargar su peso toda la vida. En general, antes de decirle algo a tu hijo piﾃｩnsalo bien. Pocos adultos son conscientes de lo que dicen, y no les vendrﾃｭa mal escucharse de vez en cuando.
Hoy en dﾃｭa tenemos a muchos aparatos tecnolﾃｳgicos, si, como lo escuchaste, tenemos a nuestra disposiciﾃｳn instrumentos con los que podemos descubrir cﾃｳmo les hablan a sus hijos: haz el expermiento de grabarte mientras te relacionas con tus hijos, luego escﾃｺchate y presta atenciﾃｳn a las palabras que le dices a tu retoﾃｱo. Te aseguro que descubrirﾃ｡s muchas cosas, algunas de ellas pueden no ser las mejores.
Fuente: Soy carmin
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