Si bien es cierto que a ninguna chica le gusta ir con el ginecólogo, no quiere decir que sea innecesario y poco importante. De hecho, es más que indispensable visitar al médico mínimo una vez cada año para que puedas descartar enfermedades, mantenerte saludable y seguir teniendo una vida sexual activa.
No evites las citas: Primero y más importante, no hagas una cita con tu ginecólogo si no vas a asistir puntualmente. El mero día puedes sentirte nerviosa e incómoda pero si ya superaste la flojera de levantarte para ir, ¿por qué no continúas el camino? Ve con tu médico, chécate y sigue adelante.
Busca a tu doctor: Si tu doctor es una persona que no le gusta comunicarse bien ¡pregunta! Sólo porque no te llamó cuando te dijo no quiere decir que las cosas estén bien. Sé precavida y ten en cuenta que son personas ocupadas y por más que quieran darte seguimiento, a veces no tendrán el tiempo suficiente. Pero es tu salud así que búscalo y haz que responda todas tus dudas.
Sé honesta: Los ginecólogos han visto y escuchado de todo así que no se sorprenderá escuchar todas las maravillas de tu vida sexual, al contrario ¡es importante que lo sepa todo! Así podrá darte buen seguimiento y te dará lo que necesites.
No seas penosa: Si tienes dudas, plantéaselas. Si hay preguntas, no dudes en preguntar nada. Estamos hablando de tu salud y no es cualquier cosa así que ¡fuera pena!
Conoce las fechas de tu periodo: La mayoría de las mujeres tiene presente qué semana tienen programada su menstruación pero si a ti te cuesta trabajo recordar esas fechas, te recomendamos utilizar un calendario. Es mega importante saber cuándo ocurrió tu último periodo y tu ginecólogo debe saberlo con precisión.
Nada de sexo antes de tu cita: El sexo puede perjudicar los resultados de tus exámenes así que si ya hiciste el esfuerzo de ir a tu cita y dejar que te toquen, ¿por qué no hacer un último sacrificio? Dile a tu galán que se espere y planea algo extra romántico para festejar el fin de tu visita al ginecólogo.
Relájate: Todas sabemos lo estresante que puede ser ir con el ginecólogo pero eso no te ayudará a relajarte ni a sentirte más cómoda. Mejor deja de pensar en lo tensa que te sientes e imagina cosas bonitas. Esto además ayudará a que la experiencia sea más rápida y menos traumática.
Fuente: Eme de mujer
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