Seguramente, el supermercado te parezca un lugar de lo más normal al cual vas a hacer tus compras todas las semanas de una manera inocente. Pero, lo que no sabes es que estos lugares esconden una gran cantidad de trucos que harán que te dejes más dinero de manera inconsciente.
Aquí te muestro algunas de las estrategias más utilizadas por los grandes supermercados. Algunas seguramente las conozcas, pero hay otras con las que te quedarás boquiabierto.
Largo recorrido:
Seguro que nunca te habías fijado, cuando vas al supermercado, que los productos de primera necesidad, como por ejemplo, la leche, los huevos, etc. Se encuentran siempre al final del establecimiento. Quizá lo veas una tontería insignificante pero cuando te explique a que se debe esto lo verás todo más claro a partir de ahora.
Esta, aunque no lo parezca, es una estrategia que adoptan los supermercados para que cuando vayas a comprar uno o varios productos de primera necesidad, pases por varios pasillos donde encontrarás una amplia gama de productos, lo cual te incitará a comprar más.
El secreto de los carritos:
Esta es una de las estrategias más visibles para nosotros, seguro que alguna vez te ha pasado que cuando coges un carro de la compra y andas con él, se va frenando poco a poco y sobretodo, se inclina hacia la izquierda. Esto se debe a que, como habrás podido comprobar, los carros de compra tienen un freno en la rueda. ¿Alguna vez te has preguntado a que se debe esto?
Bien pues te explico. El freno de las ruedas de los carritos y su inclinación hacia un lado son estrategias adoptadas por los supermercados que hacen que se ralentice tu compra, lo cual amplía las posibilidades de que no vayas a comprar solo lo que necesites y compres alguna que otra cosa más. Seguro que a partir de ahora dejas los carritos a un lado.
Precios no redondos:
Esta es, sin duda, la mejor y más prácticas de las estrategias adoptadas por los supermercados. Todo el mundo se ha fijado en que los precios nunca son redondos, es decir, que los precios nunca son, por ejemplo, 60 cent, etc. Y, ¿a qué se debe esto? Parecerá otra tontería, pero en realidad no lo es.
La sencilla razón de porque los precios no son redondos es simplemente para atraer más al cliente haciéndole ver que el precio es más económico. Además, los precios casi siempre suelen acabar en 5 o en 9, estos son los dos números que atraen más a las personas.
Las golosinas en la línea de caja:
Esta estrategia provoca una gran tentación para el consumidor. Como habrás podido comprobar perfectamente en los supermercados, las golosinas no se encuentran en el mismo lugar que los demás productos, sino que se sitúan en la línea de caja, es decir, donde pagas la compra.
Esto provoca una clara tentación que hace que te pienses si comprar algo de eso después de haber pasado varios minutos en la larga cola. Estos tipos de productos en esta posición se suelen describir como productos caprichosos, es decir, aquellos que no son necesarios.
La música al punto:
Cuando vas a un supermercado, te habrás fijado en más de una ocasión, que cuando tienen música puesta no es música que tenga mucho ritmo, además de no estar alta. Este tipo de música incitaría a que el consumidor se diera prisa con su compra y lo fuerza a moverse más rápidamente por el establecimiento.
Sin embargo, la música más tranquila, más clásica, lenta y baja es la utilizada por los supermecados porque hace que el consumidor se tome tu tiempo a la hora de comprar o elegir productos, esto estimula que los productos caros sean más consumidos y que compres más de lo necesario.
Colores:
Como puedes ver, algunas estrategias parecen una tontería pero sin embargo, todas tienen su explicación lógica, como por ejemplo, la estrategia de los colores. A priori, parece que los colores no tengan nada que ver a la hora de la toma de decisiones del consumidor, pero está claro que no es así.
Los colores cálidos atraen al cliente al punto de venta, mientras que los colores fríos fomentan la contemplación y las ventas. Lo mejor es utilizar colores cálidos para el exterior del supermercado y colores fríos para el interior. En cualquier caso estas teorías del color no están muy claras como demuestra nuestra fotografía.
Espacio:
Quizá esta no sea tan estrategia como las demás, pero es evidente que funciona a la perfección. El establecimiento de un supermercado debe de ser amplio, un lugar espacioso. Si tú vas a comprar y hay poco espacio, lo más normal es que hagas las compras a la carrera sin fijarte en los demás productos, debido a que lo que más deseas en ese momento es salir corriendo de allí.
Así que, por lo general, es mejor un establecimiento espacioso antes de algo estrecho y pequeño que pueda llegar a ser incómodo para el consumidor. Así, por mucha gente que haya, te sentirás relajado y podrás pararte con detenimiento a mirar otros productos que no estaban en tu mente pero que se encuentran allí.
Para los peques:
En general, ir a hacer la compra con algún peque significa gastarse más dinero del que deberías. Esto es normal, teniendo en cuenta que cuando vas con niños se amplia la probabilidad de comprar productos que te pidan, y tú como buen adulto, tengas que comprar.
Si vas con niños a comprar te habrás dado cuenta lo fácil que resulta que tengas que pararte cada diez pasos. No es casualidad, además, muchas veces tiene que ver con las estrategias agresivas de los distintos establecimientos. Los productos destinados al público infantil, como los postres, los cereales, los dulces… están colocados a la altura de los ojos de los más pequeños.
Lo más caro delante:
Como es normal, la prioridad de todo supermercado es o vender más, o vender los productos que son más caros. Y de eso se trata esta estrategia que te voy a contar. Si te has fijado alguna vez, los productos más caros dentro de una gama siempre están a la altura de los ojos o siempre delante para que sean más visibles.
Esto creo que no hace falta decir para que sirve. Sin duda, a veces cuando ves un producto primero lo coges sin más sin darte cuenta que detrás, al lado o más abajo estaba ese mismo producto pero a un precio más asequible, pero, esta no es la prioridad de la que hemos hablado antes de los supermercados.
De derecha a izquierda:
La mayor parte de los supermercados están situados de tal manera para que el consumidor tenga que moverse siempre de derecha a izquierda. Es por esto que los productos más tentadores o más caros se encuentran siempre en el lado derecho del supermercado.
Esto hará, de nuevo, que te fijes más en ellos, lo que amplia el número de posibilidades de que elijas esos productos que te llamen más la atención que los demás. O simplemente, aumentes tu carrito de la compra con cosas innecesarias pero tentadoras.
Fuente: Ocio
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