Oaxaca de Juárez.-Una gran decepción ha causado la noticia de que un cura pederasta cuyo delito fue plenamente acreditado alcance quizá solo cuatro años de cárcel. Se trata de un criminal que habría abusado de unos 100 niños indígenas.
El delito sexual contra un menor por parte del sacerdote Gerardo Silvestre Hernández fue debidamente acreditado por la Fiscalía General del Estado, según declaró el titular Héctor Joaquín Carrillo Ruiz. El agresor lleva desde diciembre de 2013 consignado ante las autoridades del poder judicial, formalmente preso. Pero aún no se le ha dictado sentencia.
El titular de la Fiscalía asevera que el delito del cura contra un niño indígena zapoteca fue demostrado en una investigación que se realizó entre 2012 y 2013.
En el expediente contra el sacerdote se registran dos denuncias por abuso sexual contra menores de edad. Sin embargo, sólo fue posible acreditarse uno. El fiscal dijo que por este caso probado el cura alcanzaría una pena en prisión de entre 4 y 10 años.
En 2006 Gerardo Silvestre abusó de un niño de nueve años al ocupar un interinato de seis meses en la parroquia de San Pablo Huitzo.
Según algunas fuentes, el sacerdote habría abusado de unos cien niños zapotecas. Sin embargo solo hubo dos denuncias y no ha habido más hasta el momento.
“La presentación del Arzobispo José Luis Chávez Botello a declarar será consideración del Ministerio Público que lleva el caso”, dijo el funcionario entorno a este caso. Esto debido a que el arzobispo ha sido señalado por la organización Foro Oaxaqueño de la Niñez, del sur de México, así como por activistas, de encubrir a este cura predador. Se le culpa de no haber investigado debidamente los abusos que se habrían cometido en siete comunidades indígenas, unas de las más pobres de país.
Fuente: Denunciasmx
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