Las autoridades en el norte de México encontraron a 63 niños de entre ocho y 17 años trabajando en condiciones miserables y sometidos a jornadas extenuantes en una empresa de empaque de vegetales.
Cotidianamente recibían dos comidas, una a mediodía y otra al concluir la jornada de trabajo y durante sus horas laborales eran hidratados con agua con sal.
Los menores, la mayoría hombres, solo tenían dos baños con una ducha sin agua caliente y dormían en colchonetas ubicadas en el suelo en cobertizos aledaños a la empacadora.
Trabajaban en dos predios, denominados El Pedregal y Santa Cruz, están ubicados en el Ejido El Higo, municipio de Ramos Arizpe y pertenecen a la empresa Prokarne, propiedad de Óscar Lozano Chávez.
Los menores se dedicaban a seleccionar y empacar legumbres.
El gobierno estatal dijo que los menores declararon que sólo contaban con medio día libre a la semana. Se les pagaban 100 pesos –equivalentes a unos seis dólares-- al día, una cantidad ligeramente superior al salario mínimo, de 70 pesos diarios --unos cuatro dólares--.
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Los menores fueron trasladados a un albergue estatal para recibir atención, mientras que tres hombres de 50, 39 y 36 años fueron detenidos por las autoridades por su posible responsabilidad en la explotación de los menores.
El gobierno estatal señaló que las víctimas eran reclutadas a través de anuncios en los medios de comunicación y trasladados en camiones hasta Ramos Arizpe, una ciudad con un importante parque industrial situada a unos 280 km de la frontera con Estados Unidos. Son originarios de Tamaulipas, Veracruz, Hidalgo y San Luis Potosí.
La Procuradora del Estado de Coahuila, Yezka Garza, explicó en declaraciones a una televisora local que el miércoles "un señor que había ido a recoger a su hija y no se la entregaban porque no había cumplido su contrato, presentó la denuncia. Llegamos al lugar y aseguramos a los niños".
La Procuradora dijo que la investigación abierta es por el delito de trata de personas. "Se está tomando declaración a cada niño, niña y adulto para tener un expediente bien alimentado". "Hemos estado sobrevolando toda la zona para detectar otros predios similares conurbados en torno al rancho", agregó.
La operación de rescate la llevaron a cabo autoridades encabezadas por la Procuraduría de las Niñas, los Niños y la Familia; la Secretaría del Trabajo y la Procuraduría General de Justicia del Estado.
Las leyes mexicanas generalmente permiten que menores de entre 14 y 16 años de edad hagan ciertos trabajos pero lo impiden en muchas labores agrícolas. No obstante, el trabajo infantil está sumamente extendido.
El gobierno mexicano calcula que hay más de dos millones de jornaleros en México (con 118 millones de habitantes) que viven en condiciones de semiesclavitud, sin contrato ni prestaciones sociales y que, pese a la dureza de sus trabajos de hasta 10 horas, cobran en promedio entre cuatro y siete dólares diarios.
Unos 30,000 campesinos se rebelaron en marzo en el valle de San Quintín (Baja California, noroeste) denunciando las condiciones de explotación en las que trabajan.
Fuente: Univision
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