No es tu rutina de ejercicio lo que falla, es el azúcar de tu sangre.
Hay veces en las que los cambios de dietas, ni el ejercicio, parecen suficientes para adelgazar. Tienes unos kilos que parecieran estar estancados en ti. La verdad es que si no acudimos por un diagnóstico personalizado, ni comprendemos nuestro cuerpo por completo, será difícil encontrar nuestra “fórmula perfecta”.
La nutricionista Meghan Telpner ha tenido a muchos pacientes con este problema. Y todo depende del organismo de cada uno, en especial en cómo procesas los carbohidratos y el azúcar. Si tienes altos niveles de azúcar en la sangre, intentar adelgazar será mucho más difícil. Aún si sólo deseas perder pocos kilos. Por eso, ella da unos simples consejos, efectivos para regular los niveles de azúcar, y encontrar el peso perfecto:
1. Practica la meditación
Sí, esto no tiene nada que ver con la alimentación. Pero además de la dieta y el ejercicio, es importante que tu mente esté tranquila. Nada te será tan efectivo si te sientes estresado, o desconectado. Necesitas estar más estable para cambiar. Esto influye mucho en detener las comidas emocionales que puedes tener.
Si no te interesa la meditación, busca tiempos a solas de tranquilidad, como meterte en la bañera, o salir a caminar y ponerte en contacto con la naturaleza.
2. Toma desayunos balanceados
Es triste, pero debes dejar de comer cereales pensando que son saludables. El desayuno es tu base de energía para el día, además de nutrientes. Es importante que aprendas a combinar los alimentos necesarios, como grasas sanas, carbohidratos, y proteínas. Si tienes un buen desayuno, tu organismo ya comenzará a procesar mejor todo para el resto del día.
Céntrate en consumir alimentos como semillas, frutos secos, huevos, mantequillas en base a nueces (maní, almendra) y frutas. ¡Anímate a ser creativo!
3. Ten a mano bocadillos inteligentes
Cuando nos da hambre y aún no es hora de almorzar, ni comer, ¿qué haces? Recurres a los bocadillos.
Es por lo mismo, que debes tener opciones más sabias a la mano. Asegúrate de prepararlos o de tener una buena fuerza de voluntad. Pues cuando los antojos atacan, se te viene a la cabeza lo más simple – y lo más calórico. Lo peor de ello en verdad es el azúcar. Puedes optar por frutos secos, barras de granola, galletas sin gluten con algún agregado o frutas.
Fuente: Vip digital
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